Milenrama: una planta con muchos beneficios para tu jardín y tu salud
La milenrama es una planta herbácea perenne que pertenece a la familia de las asteráceas o compuestas. Su nombre científico es Achillea millefolium, que hace referencia a su gran cantidad de hojas finamente divididas (millefolium significa mil hojas) y al héroe griego Aquiles, que según la leyenda utilizaba esta planta para curar las heridas de sus soldados en la guerra de Troya.
La milenrama es originaria de Europa y Asia, pero se ha naturalizado en muchas otras partes del mundo, como América, Australia y Nueva Zelanda. Es una planta muy resistente y adaptable, que crece en todo tipo de suelos y climas, desde los más secos y áridos hasta los más húmedos y fríos. Se puede encontrar en prados, bordes de caminos, terrenos baldíos y zonas rocosas.
La milenrama tiene un tallo erecto y ramificado que puede alcanzar hasta un metro de altura. Sus hojas son alargadas, alternas y de color verde claro, con un aspecto plumoso y un olor aromático. Sus flores son pequeñas y blancas, aunque también pueden ser rosadas, rojas o amarillas, según la variedad. Se agrupan en capítulos planos que forman corimbos terminales. Su floración se produce desde la primavera hasta el otoño.
La milenrama es una planta muy apreciada por sus múltiples usos y beneficios. Se utiliza como planta ornamental, medicinal, comestible, aromática y ecológica. A continuación, te explicamos cada uno de estos aspectos con más detalle.
- La milenrama como planta ornamental
- Enfermedades y plagas de la milenrama
- Tipos de milenrama
- La milenrama como planta medicinal
- Cómo hacer una infusión de milenrama
- Cómo hacer un aceite esencial de milenrama
- La milenrama como planta comestible
- La milenrama como planta aromática
- Cómo hacer un saquito aromático de milenrama
- La milenrama como planta ecológica
- Preguntas frecuentes sobre la milenrama
La milenrama como planta ornamental
La milenrama es una planta muy decorativa que puedes utilizar para embellecer tu jardín o tu balcón. Su aspecto silvestre y natural le da un toque rústico y campestre a cualquier espacio. Además, sus flores atraen a las abejas, las mariposas y otros insectos beneficiosos para la polinización.
La milenrama se puede cultivar tanto en macetas como en el suelo. Lo ideal es ubicarla en un lugar soleado o con sombra parcial, donde reciba al menos unas horas de luz directa al día. No necesita mucha agua ni abono, ya que se adapta bien a los suelos pobres y secos. Sin embargo, conviene regarla con moderación durante la floración para favorecer su desarrollo.
La milenrama se puede reproducir por semillas, esquejes o división de matas. Las semillas se pueden sembrar directamente en el lugar definitivo o en semilleros protegidos durante la primavera o el verano. Los esquejes se pueden obtener de los tallos jóvenes en primavera o verano y se deben plantar en un sustrato húmedo y arenoso. La división de matas se puede realizar en primavera u otoño, separando los rizomas con cuidado y trasplantándolos a otro lugar.
La milenrama no suele tener problemas graves de plagas o enfermedades, pero puede ser atacada por pulgones, ácaros o nematodos. Para prevenirlos o combatirlos, se recomienda aplicar tratamientos ecológicos a base de jabón potásico, aceite de neem o infusiones de ajo o cola de caballo.
Las flores de milenrama
Las flores de milenrama son pequeñas y numerosas, y se agrupan en inflorescencias planas y densas que forman corimbos terminales en los tallos. Cada inflorescencia está compuesta por dos tipos de flores: las liguladas y las del disco.
- Las flores liguladas son las que se encuentran en el borde de la inflorescencia, y tienen forma de lengüeta o pétalo. Son de color blanco, rosa o rojo, según la variedad, y solo son femeninas, es decir, solo tienen el órgano reproductor femenino llamado pistilo.
- Las flores del disco son las que se encuentran en el centro de la inflorescencia, y tienen forma de tubo o botón. Son de color amarillo o blanco, según la variedad, y son hermafroditas, es decir, tienen los órganos reproductores masculino y femenino llamados estambre y pistilo.
Las flores de milenrama tienen un olor intenso y agradable, que varía según la variedad y el momento del día. El olor se debe a los aceites esenciales que contienen, que tienen propiedades aromáticas, medicinales e insecticidas.
Las flores de milenrama se abren desde la primavera hasta el otoño, dependiendo del clima y la latitud. La floración suele durar varios meses, y se puede prolongar si se eliminan las flores marchitas.
Las flores de milenrama son muy atractivas para las abejas, las mariposas y otros insectos polinizadores, que se encargan de transportar el polen de una flor a otra y así favorecer la reproducción de la planta. Gracias a estos insectos, la milenrama produce unas semillas pequeñas y aladas que se dispersan por el viento o por los animales.
Las flores de milenrama se pueden recolectar cuando están completamente abiertas, preferiblemente por la mañana y con tiempo seco. Se pueden secar al sol o en un lugar ventilado y oscuro, y se pueden conservar en recipientes herméticos durante varios meses.
Las flores de milenrama se pueden utilizar para diversos fines, como:
- Ornamentales: se pueden usar para hacer ramos, coronas, centros o arreglos florales. También se pueden usar para decorar platos o postres.
- Medicinales: se pueden usar para hacer infusiones, tinturas, jarabes, cataplasmas o baños. Tienen propiedades cicatrizantes, antiinflamatorias, digestivas, diuréticas y febrífugas, entre otras.
- Comestibles: se pueden usar para hacer bebidas refrescantes o fermentadas, como infusiones, limonadas, cervezas o vinos. También se pueden usar como condimento o como ingrediente de ensaladas, sopas, guisos o tortillas.
- Aromáticas: se pueden usar para hacer saquitos aromáticos que se pueden colocar en los armarios o en las almohadas para aromatizar la ropa o facilitar el sueño. También se puede hacer aceite esencial o agua floral de milenrama mediante destilación o maceración.

Cómo cultivar milenrama por esquejes
Una forma de reproducir la milenrama es mediante esquejes, que son trozos de tallo que se cortan de la planta madre y se enraízan en un nuevo sustrato. Esta técnica tiene la ventaja de que se obtienen plantas idénticas a la original, conservando sus características y su variedad. Para cultivar milenrama por esquejes, debes seguir estos pasos:
- Elige una planta sana y vigorosa de milenrama, preferiblemente que no esté en floración, ya que así tendrá más energía para enraizar.
- Corta con unas tijeras o un cuchillo afilado unos tallos jóvenes y tiernos de unos 10 cm de largo, con al menos 3 o 4 nudos cada uno. Haz el corte justo por debajo de un nudo, que es donde saldrán las raíces.
- Elimina las hojas inferiores de los esquejes, dejando solo las superiores. Esto evitará la pérdida de agua y la aparición de hongos.
- Prepara un sustrato húmedo y suelto, que puede ser una mezcla de arena y turba, o de perlita y vermiculita. Llena con este sustrato unas macetas o bandejas con agujeros de drenaje.
- Haz unos agujeros en el sustrato con un lápiz o un palillo, y coloca los esquejes en ellos, enterrando unos 2 o 3 cm del tallo. Presiona el sustrato alrededor de los esquejes para que queden firmes.
- Riega los esquejes con cuidado para asentar el sustrato y eliminar las burbujas de aire. Mantén el sustrato húmedo pero no encharcado durante todo el proceso de enraizamiento.
- Coloca las macetas o bandejas en un lugar cálido y luminoso, pero sin sol directo. Puedes cubrir los esquejes con una bolsa de plástico transparente o un recipiente de vidrio para crear un efecto invernadero y mantener la humedad y la temperatura.
- Ventila los esquejes cada día, retirando el plástico o el vidrio durante unos minutos para renovar el aire y evitar el exceso de condensación.
- Vigila el estado de los esquejes y elimina los que se marchiten o se pudran. También puedes aplicar algún fungicida natural, como canela o cola de caballo, para prevenir las enfermedades.
- Espera unas 4 o 6 semanas hasta que los esquejes hayan desarrollado raíces suficientes. Puedes comprobarlo tirando suavemente del tallo y viendo si ofrece resistencia.
- Cuando los esquejes estén enraizados, trasplántalos a macetas individuales con un sustrato más rico y nutritivo, como una mezcla de tierra, compost y arena. Riega bien después del trasplante y coloca las macetas en un lugar soleado o con sombra parcial.
- Cuida de tus nuevas plantas de milenrama regándolas moderadamente, abonándolas ocasionalmente con un fertilizante orgánico y eliminando las flores marchitas para prolongar la floración.
Cómo cultivar milenrama por semilla
Otra forma de reproducir la milenrama es mediante semillas, que son los óvulos fecundados que se encuentran dentro de las flores. Esta técnica tiene la ventaja de que se pueden obtener muchas plantas a partir de pocas semillas, y también se pueden obtener nuevas variedades por hibridación. Para cultivar milenrama por semilla, debes seguir estos pasos:
- Elige unas semillas de buena calidad, preferiblemente ecológicas y certificadas. Puedes comprarlas en un vivero o una tienda especializada, o recolectarlas tú mismo de una planta de milenrama madura. Para ello, espera a que las flores se sequen y se vuelvan marrones, y corta los capítulos con unas tijeras o un cuchillo. Colócalos en un recipiente seco y agítalos para extraer las semillas. Luego, tamízalas para separarlas de los restos de flores y guárdalas en un sobre de papel o en un frasco de vidrio hasta que las vayas a usar.
- Prepara un sustrato ligero y esponjoso, que puede ser una mezcla de turba y arena, o de perlita y vermiculita. Llena con este sustrato unas bandejas o macetas con agujeros de drenaje.
- Esparce las semillas sobre el sustrato, sin enterrarlas ni apelmazarlas. Puedes mezclarlas con un poco de arena para distribuirlas mejor. Luego, rocía el sustrato con un pulverizador para humedecerlo sin desplazar las semillas.
- Coloca las bandejas o macetas en un lugar cálido y luminoso, pero sin sol directo. Puedes cubrir las semillas con una bolsa de plástico transparente o un recipiente de vidrio para crear un efecto invernadero y mantener la humedad y la temperatura.
- Ventila las semillas cada día, retirando el plástico o el vidrio durante unos minutos para renovar el aire y evitar el exceso de condensación.
- Mantén el sustrato húmedo pero no encharcado durante todo el proceso de germinación. Puedes regar las semillas con un pulverizador o con una regadera con una boquilla fina para no dañarlas.
- Espera unas 2 o 3 semanas hasta que las semillas germinen y aparezcan las primeras plántulas. Puedes comprobarlo viendo si salen unos pequeños brotes verdes del sustrato.
- Cuando las plántulas tengan unas 4 hojas, puedes trasplantarlas a macetas individuales con un sustrato más rico y nutritivo, como una mezcla de tierra, compost y arena. Riega bien después del trasplante y coloca las macetas en un lugar soleado o con sombra parcial.
- Cuida de tus nuevas plantas de milenrama regándolas moderadamente, abonándolas ocasionalmente con un fertilizante orgánico y eliminando las flores marchitas para prolongar la floración.
Enfermedades y plagas de la milenrama
La milenrama es una planta bastante resistente y saludable, pero puede sufrir algunos problemas de enfermedades y plagas si no se le proporcionan las condiciones adecuadas. Estos son algunos de los más comunes:
- Moho o pudrición de la raíz: se produce cuando el suelo está demasiado húmedo o compactado, lo que favorece el desarrollo de hongos que atacan las raíces y el tallo de la planta. Los síntomas son marchitamiento, amarilleamiento y caída de las hojas. Para prevenirlo, se debe mejorar el drenaje del suelo, regar con moderación y evitar el encharcamiento. Para tratarlo, se debe eliminar las partes afectadas y aplicar un fungicida adecuado.
- Pulgones: son pequeños insectos que se alimentan de la savia de las hojas y los tallos, provocando deformaciones, manchas y debilitamiento de la planta. También pueden transmitir virus y favorecer la aparición de hongos como el mildiú o la roya. Para prevenirlos, se debe mantener la planta sana y vigorosa, eliminar las malas hierbas y atraer a sus depredadores naturales, como las mariquitas o los crisopas. Para combatirlos, se puede aplicar un insecticida ecológico a base de jabón potásico, aceite de neem o infusiones de ajo o ortiga.
- Nematodos: son gusanos microscópicos que viven en el suelo y se introducen en las raíces de la planta, causando agallas, nudos o quistes. Esto afecta al crecimiento y la absorción de nutrientes de la planta, que se vuelve más débil y susceptible a otras enfermedades. Para prevenirlos, se debe rotar el cultivo con otras plantas resistentes o no hospedadoras, como el maíz, el trigo o el centeno. Para controlarlos, se puede aplicar un nematicida químico o biológico, o solarizar el suelo con plástico negro durante unas semanas.
Tipos de milenrama
La milenrama es una planta muy diversa que tiene casi mil especies y variedades diferentes. Estas son algunas de las más populares y cultivadas:
- Milenrama común (Achillea millefolium): es la especie más extendida y conocida, que tiene flores blancas o rosadas en corimbos planos. Es muy resistente y adaptable a todo tipo de climas y suelos.
- Milenrama amarilla (Achillea filipendulina): es una especie originaria del Cáucaso que tiene flores amarillas en corimbos densos. Alcanza hasta un metro de altura y es muy ornamental y medicinal.
- Milenrama de hoja de helecho (Achillea filipendulina ‘Parker’): es una variedad de la anterior que tiene flores amarillas más grandes y brillantes, y hojas más finas y delicadas. Es muy llamativa y atractiva para las abejas y las mariposas.
- Milenrama de pimentón (Achillea millefolium ‘Paprika’): es una variedad de la milenrama común que tiene flores rojas con un centro amarillo. Es muy vistosa y contrasta bien con otras plantas de colores claros.
- Milenrama de luz de luna (Achillea millefolium ‘Moonshine’): es una variedad de la milenrama común que tiene flores amarillas pálidas y hojas plateadas. Es muy elegante y luminosa, y se adapta bien a los climas secos y calurosos.
La milenrama como planta medicinal
La milenrama es una planta con una larga tradición medicinal que se remonta a la antigüedad. Sus propiedades curativas se deben a sus principios activos, como los aceites esenciales, los flavonoides, los taninos, las cumarinas y los alcaloides.
Entre los beneficios de la milenrama para la salud, destacan los siguientes:
- Es cicatrizante y hemostática: ayuda a detener las hemorragias externas e internas, como las nasales, las menstruales o las hemorroidales. También favorece la regeneración de los tejidos y la curación de las heridas, las úlceras y las quemaduras.
- Es antiinflamatoria y analgésica: alivia el dolor y la inflamación de las articulaciones, los músculos, la garganta y la boca. También reduce la hinchazón y el enrojecimiento de la piel causados por picaduras, alergias o dermatitis.
- Es digestiva y carminativa: mejora la digestión, estimula el apetito, previene las flatulencias y los espasmos intestinales. También protege el hígado y la vesícula biliar.
- Es diurética y depurativa: favorece la eliminación de líquidos y toxinas del organismo, previniendo la retención de líquidos, la hipertensión, la gota y los cálculos renales.
- Es antiespasmódica y emenagoga: regula el ciclo menstrual, alivia los dolores y los cólicos menstruales, y combate el síndrome premenstrual. También ayuda a inducir el parto y a expulsar la placenta.
- Es diaforética y febrífuga: induce la sudoración y baja la fiebre, ayudando a combatir las infecciones respiratorias, como el resfriado, la gripe o la bronquitis.
- Es sedante y nervina: calma los nervios, el estrés, la ansiedad y el insomnio. También mejora el ánimo y combate la depresión.
La milenrama se puede consumir de diferentes formas, como infusiones, tinturas, jarabes, cataplasmas o baños. Sin embargo, hay que tener en cuenta que se trata de una planta muy potente que puede tener efectos secundarios o contraindicaciones. Por eso, se recomienda consultar con un médico o un especialista antes de usarla, especialmente si se está embarazada, lactando, tomando medicamentos o se padece alguna enfermedad crónica.

Cómo hacer una infusión de milenrama
Una de las formas más sencillas y habituales de consumir la milenrama es en forma de infusión. Esta bebida tiene propiedades digestivas, antiinflamatorias, diuréticas y febrífugas, entre otras. Para preparar una infusión de milenrama, solo necesitas los siguientes ingredientes:
- Una cucharadita de flores secas de milenrama (unos 2 gramos).
- Una taza de agua (unos 250 ml).
- Miel, azúcar o edulcorante al gusto (opcional).
Los pasos a seguir son los siguientes:
- Pon el agua a hervir en un cazo o una tetera.
- Cuando el agua empiece a hervir, apaga el fuego y añade las flores de milenrama.
- Tapa el recipiente y deja reposar la infusión durante unos 10 minutos.
- Cuela la infusión y endúlzala si lo deseas.
- Disfruta de tu infusión de milenrama caliente o fría, según tu preferencia.
Puedes tomar una o dos tazas de infusión de milenrama al día, preferiblemente después de las comidas o antes de acostarte. No obstante, recuerda consultar con tu médico o tu especialista antes de consumir esta planta, especialmente si tienes alguna condición médica o estás tomando algún medicamento.
Cómo hacer un aceite esencial de milenrama
Otra forma de aprovechar los beneficios de la milenrama es haciendo un aceite esencial con sus flores. Este aceite tiene propiedades antisépticas, cicatrizantes, antiinflamatorias y analgésicas, entre otras. Se puede aplicar sobre la piel para tratar heridas, inflamaciones, irritaciones o dolores musculares o articulares. Para hacer un aceite esencial de milenrama, necesitas los siguientes ingredientes:
- Un puñado de flores frescas o secas de milenrama (unos 50 gramos).
- Un frasco de vidrio con tapa que pueda contener unos 250 ml.
- Aceite vegetal de tu elección (oliva, almendra, coco, etc.).
- Un colador o una gasa.
Los pasos a seguir son los siguientes:
- Limpia bien las flores de milenrama y sécalas con un paño o al aire libre.
- Llena el frasco con las flores hasta cubrirlo por completo.
- Cubre las flores con el aceite vegetal hasta llenar el frasco.
- Cierra el frasco y agítalo bien para mezclar los ingredientes.
- Coloca el frasco en un lugar cálido y soleado durante unas dos semanas. Agita el frasco cada día para favorecer la extracción de los principios activos.
- Pasado ese tiempo, filtra el aceite con un colador o una gasa y desecha las flores.
- Guarda el aceite en un frasco limpio y oscuro, etiquetándolo con la fecha y el nombre del producto.
- Conserva el aceite en un lugar fresco y seco, alejado de la luz y el calor.
Puedes aplicar unas gotas de aceite esencial de milenrama sobre la zona afectada y masajear suavemente hasta que se absorba. También puedes añadir unas gotas a tu crema hidratante o a tu champú para potenciar sus efectos. No obstante, recuerda hacer una prueba de alergia antes de usar este aceite sobre la piel, aplicando una pequeña cantidad en el interior del codo y esperando 24 horas para ver si hay alguna reacción.
La milenrama como planta comestible
La milenrama no solo es una planta medicinal, sino también una planta comestible que se puede aprovechar en la cocina. Sus hojas y sus flores tienen un sabor amargo y picante que recuerda al del romero o el tomillo. Se pueden consumir crudas o cocinadas, como condimento o como ingrediente de ensaladas, sopas, guisos o tortillas.
La milenrama también se puede utilizar para elaborar bebidas refrescantes o fermentadas, como infusiones, limonadas, cervezas o vinos. Además, sus flores se pueden emplear para decorar platos o postres.
La milenrama es una planta rica en vitaminas, minerales y antioxidantes que aporta beneficios nutricionales al organismo. Sin embargo, hay que consumirla con moderación y precaución, ya que puede tener efectos adversos si se abusa de ella o si se es alérgico a ella.
La milenrama como planta aromática
La milenrama es una planta aromática que desprende un olor intenso y agradable que puede perfumar el ambiente o servir para elaborar productos de cosmética natural. Sus aceites esenciales tienen propiedades antisépticas, antibacterianas, antifúngicas e insecticidas que pueden ayudar a desinfectar el aire o a repeler a los insectos.
La milenrama se puede utilizar para hacer saquitos aromáticos que se pueden colocar en los armarios o en las almohadas para aromatizar la ropa o facilitar el sueño. También se puede hacer aceite esencial de milenrama mediante destilación o maceración en aceite vegetal. Este aceite se puede aplicar sobre la piel para tratar heridas, inflamaciones o irritaciones. También se puede añadir a cremas, lociones o jabones caseros para aprovechar sus beneficios.
La milenrama también se puede usar para hacer agua floral o hidrolato de milenrama mediante destilación. Este agua se puede utilizar como tónico facial para limpiar y tonificar la piel. También se puede rociar sobre el cabello para darle brillo y suavidad.
Cómo hacer un saquito aromático de milenrama
Un saquito aromático es un pequeño saco o bolsita relleno de plantas secas que se puede usar para perfumar el ambiente o para relajar los sentidos. La milenrama es una planta ideal para hacer un saquito aromático, ya que tiene un olor intenso y agradable que puede ayudar a mejorar el ánimo y a facilitar el sueño. Para hacer un saquito aromático de milenrama, necesitas los siguientes materiales:
- Un trozo de tela suave y transpirable (algodón, lino, seda, etc.).
- Un cordón o una cinta para cerrar el saquito.
- Unas tijeras y una aguja e hilo (opcional).
- Un puñado de flores secas de milenrama (unos 25 gramos).
Los pasos a seguir son los siguientes:
- Corta un cuadrado de tela de unos 15 cm de lado.
- Dobla la tela por la mitad y cose los bordes, dejando una abertura en uno de los lados. También puedes usar una bolsita de tela ya hecha y saltarte este paso.
- Rellena el saquito con las flores secas de milenrama, sin apretar demasiado.
- Cierra el saquito con el cordón o la cinta, haciendo un nudo o un lazo.
- Coloca el saquito en el lugar que quieras aromatizar, como el armario, la almohada o el coche.
Puedes hacer varios saquitos aromáticos con diferentes plantas y combinarlos entre sí para crear distintos aromas. También puedes regalarlos a tus familiares o amigos como un detalle original y natural. No obstante, recuerda cambiar el relleno de los saquitos cada cierto tiempo, cuando pierdan su olor o se humedezcan.
La milenrama como planta ecológica
La milenrama es una planta ecológica que contribuye a mejorar el medio ambiente y a fomentar la biodiversidad. Algunas de las ventajas de la milenrama para el ecosistema son las siguientes:
- Es una planta melífera: como ya hemos mencionado, sus flores atraen a las abejas y otros insectos polinizadores, que son esenciales para la reproducción de muchas plantas y para la producción de miel y otros productos apícolas.
- Es una planta asociativa: se lleva bien con otras plantas y puede beneficiarlas con su presencia. Por ejemplo, la milenrama puede mejorar la calidad del suelo al aportar nitrógeno y materia orgánica. También puede repeler a algunas plagas, como los nematodos o los áfidos, que pueden dañar a otras plantas. Además, puede favorecer el crecimiento y la floración de otras plantas aromáticas o medicinales, como la lavanda, el tomillo o la salvia.
- Es una planta comodín: se adapta a cualquier tipo de suelo y clima, por lo que se puede cultivar en cualquier lugar. Además, no requiere mucha atención ni cuidados, por lo que se puede dejar crecer libremente sin necesidad de podarla o trasplantarla.
Como ves, la milenrama es una planta muy útil y versátil que puedes incorporar a tu jardín o a tu huerto ecológico. No solo te ofrecerá un espectáculo de color y aroma, sino que también te proporcionará beneficios para tu salud y para el medio ambiente.
Preguntas frecuentes sobre la milenrama
A continuación, te respondemos a algunas de las preguntas más comunes que pueden surgirte sobre la milenrama:
¿Qué diferencia hay entre la milenrama y la manzanilla?
La milenrama y la manzanilla son dos plantas diferentes, aunque pertenecen a la misma familia botánica (las asteráceas o compuestas) y tienen algunas propiedades medicinales similares. La principal diferencia es que la manzanilla tiene las flores amarillas y con forma de botón, mientras que la milenrama tiene las flores blancas y con forma de disco. Además, la manzanilla tiene un olor dulce y característico, mientras que la milenrama tiene un olor más fuerte y picante.
¿Qué parte de la milenrama se utiliza?
La parte más utilizada de la milenrama son las flores, que se pueden recolectar cuando están completamente abiertas, preferiblemente por la mañana y con tiempo seco. Las flores se pueden secar al sol o en un lugar ventilado y oscuro, y se pueden conservar en recipientes herméticos durante varios meses. También se pueden utilizar las hojas, que se pueden recolectar durante todo el año, siempre que estén verdes y sanas. Las hojas se pueden consumir frescas o secas, igual que las flores.
¿Qué precauciones hay que tener con la milenrama?
La milenrama es una planta segura y beneficiosa para la mayoría de las personas, pero hay que tener en cuenta algunas precauciones antes de usarla. Por ejemplo:
- No se debe consumir en exceso ni durante periodos prolongados, ya que puede causar irritación gástrica, alergias o interacciones con otros medicamentos.
- No se debe consumir si se está embarazada o lactando, ya que puede provocar contracciones uterinas o alterar la producción de leche materna.
- No se debe consumir si se tiene alguna enfermedad hepática, renal o cardiovascular, ya que puede afectar al funcionamiento de estos órganos.
- No se debe aplicar sobre heridas abiertas o infectadas, ya que puede empeorar el estado de las mismas.
- No se debe aplicar sobre la piel si se es alérgico a esta planta o a otras plantas de la misma familia, como el crisantemo, la margarita o el girasol.
Si quieres saber más sobre la milenrama, te invitamos a consultar las fuentes que hemos utilizado para elaborar este artículo, que puedes encontrar al final del mismo. También te animamos a que compartas tu experiencia con esta planta, si la has cultivado o utilizado alguna vez, o si tienes alguna duda o sugerencia al respecto.
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